El origen del pueblo de Obidos se remonta al siglo I, a la ciudad de Eburobrittium. En esta ciudad pasaron romanos, visigodos y árabes. El pueblo de Óbidos tiene un enorme patrimonio arquitectónico, religioso e histórico. Muchos monarcas pasaron por estas tierras donde dejaron un hito, que el pueblo mantiene con orgullo.
El encanto de este pueblo se ha conservado a lo largo de los siglos y lo convierten en un magnífico destino vacacional por sus monumentos, sus calles sinuosas y sus pequeñas casas con sus característicos ventanales y balcones llenos de flores. Todo este entorno histórico transmite un viaje en el tiempo a los días en que la monarquía visitaba el pueblo.
Aquí se puede visitar el Castillo de Óbidos, clasificado como Monumento Nacional, que fue convertido en una casa de huéspedes.
Óbidos Castle
La Puerta de la Villa data del siglo XVII, caracterizada por el azulejo del siglo XVIII y por la capilla-oratorio con balcón del siglo XVII. «La Virgen Nuestra Señora fue concebida sin pecado original» es la inscripción que se encuentra en la puerta principal de la aldea de Óbidos. Esta inscripción fue puesta bajo las órdenes del rey João IV, como agradecimiento por la protección de la Patrona, en 1640. La Puerta de la Villa está conectada al Poço por la Rua Direita, la calle principal de la villa.
Door of the Village – Óbidos
También se puede aprovechar para visitar la Capilla de Nuestra Señora del Carmo, la Iglesia de Santa María, la Iglesia de la Misericordia, la Capilla de S. Martinho, el Santuario del Señor de la Pedra y el Museo Municipal.
Si le gusta visitar los lugares que cuentan historias, es un destino que no se puede perder.
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